Matar a un ruiseñor

Matar a un ruiseñor.
Autor: Harper Lee
El principio del libro en entretenido sin mas. "Scoutt" nos narra los veranos jugando con su hermano mayor Jeremy, o "Jem" como ella le llama, y con su amigo Dill. Esta parte, llena de travesuras y salpicada del calor de los veranos del sur, me recordó a la de casi todas las "Bildungromanen" que he leído, muy al estilo Dickens pero mas alegre. Destaca la travesura en que los chicos intentan hacer salir a su vecino, Arthur "Boo" Radley, un joven que vive bajo la tutela de su hermano mayor tras haber fallecido su padre, que ha permanecido encerrado en su casa durante años, y sobre quien corren mil leyendas, desde que fue confinado por su comportamiento escandaloso y rebelde hasta que padece algún tipo de enfermedad menta y se alimenta de gatos.
El final de esta fantástica novela es sin duda lo mejor. Bob Ewell, a pesar de haberse salido con la suya, se dedica a molestar a todos los que le pusieron en ridiculo en el juicio, empezando por la viuda de Tom Robinson, que es defendida por su patrón. Tambien intenta atacar a Scoutt y a Jeremy, rompiendo un brazo al muchacho cuando los dos volvían de noche de una unción escolar. Pero alguien socorre en secreto a los niños... el final nos hace creer que fue el recluido Boo Radley, quien observaba desde siempre las travesuras de los chicos, y sintió cariño por ellos, así que les socorrió en un momento de peligro, matando a Bob Ewell con el mismo cuchillo con el que este pretendía agredir a los chicos. Sin embargo, el sheriff del condado, que en sucedía declaro en favor de Ewell, prefiere dejarlo en que el tipo se cayo sobre su propio cuchillo y se hirió de muerte. Y es en ese pequeño favor del sheriff donde vemos como es recompensada de algún modo, la honradez de Atticus.
Tiene algo de melancolía, de verano caluroso y de la tristeza del fracaso inevitable que me parece inolvidable y es lo que hace a esta novela una obra maestra.
Matar a un ruiseñor muestra una comunidad dominada por los prejuicios raciales, la desconfianza hacia lo diferente, la rigidez de los vínculos familiares y vecinales. Y con un sistema judicial sin apenas garantías para la población negra.
Una novela súper interesante, tal vez lo que se lee fue lo algún día paso, debemos darnos cuenta el daño que se hace a la misma gente.
Si uno toma un cambio podremos lograrlo, todos somos igual; sólo con diferentes ideas y pensamientos. Pero nadie vale más que otros, aquí todos somos humanos y debemos darnos respeto entre nosotros mismo. Luchar por una mejor vida.